El jueves 5 de agosto de 2021 se anunció un cambio en la interpretación de la ley de inmigración de los EE. UU. que permite que los niños nacidos en el extranjero de padres que usaron tecnología de reproducción asistida, como la subrogación, califiquen para la ciudadanía estadounidense.
Los niños nacidos en el extranjero de parejas casadas que incluyan a un ciudadano estadounidense ya no necesitarán tener una conexión biológica con el padre estadounidense para ser elegibles para la ciudadanía estadounidense y los beneficios de inmigración basados en la familia.
Ahora, siempre que uno de los padres sea ciudadano estadounidense y uno de los padres esté relacionado genéticamente o haya dado a luz al niño, el bebé cumplirá con los requisitos de elegibilidad para la ciudadanía estadounidense. Sin embargo, los padres deben estar casados y ser reconocidos como tutores legales del niño en sus lugares de residencia para calificar.
Este cambio en la política del Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos (USCIS, por sus siglas en inglés) se ajusta a un anuncio similar emitido en mayo por el Departamento de Estado.
Los niños que se beneficiarán de los cambios de esta política podrían haber sido considerados previamente como nacidos "fuera del matrimonio" según la antigua interpretación de la ley de los EE. UU., lo que los hace inelegibles para la ciudadanía de los EE. UU. y otros beneficios.